Y en esta España, Nueva Rumasa puede acabar siendo aquella Rumasa de tramperos. Porque trampero pudo resultar el gobierno con azote ejemplarizante y cuestinoble reprivatización. Pero aquel Ruíz Mateos? Acaso no fue trampero?
El género epistolar se vuelve revelador del engaño, Querido Emilio...
No hay comentarios:
Publicar un comentario