domingo, 10 de agosto de 2008

Mamma Mia!

Era justo lo que necesitaba, aunque todo sea una gran mentira a modo de cuento de hadas con puesta en escena a lo comedia griega. Me pase todo el tiempo bailándola aunque sólo fuese con los pies, así que desconecta tu ideología de género y disfruta!
No es West Side Story pero te deja el regusto final de haber pasado un momento agradable y divertido con música de Abba, cuántas vidas la tendrán en su banda sonora?.
Esto es cine de evasión, así que repito, desconectemos nuestra conciencia de la construcción de género (que si dónde está mi padre que me lleve al altar en el día más feliz de mi vida...) y disfrutemos.
Los malignos pensarán cómo alguién puede besar a Meryl Streep y no convertirse en piedra, o si la escena de los saltos en la cama(-elastiquísima) necesitó un doble de cuerpo o algún arnés, o cómo supero su hija que el novio de esta le quemase el pelo con un puro (en la playa), o que nuestra Meryl llamase cordero a lo que era más un pavo, o la salida del armario de uno de sus padres, o los topicazos a la hora de abordar Grecia, pero no importa,todo ello merece la pena y se pasa por alto con el buen rollo que te genera. Disfrutas con su música, la que es de Abba, con los bailes, la comedia. Todos resultan agraciados. Para ver y regalar.

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